La verdadera libertad empieza en uno mismo.
Para saber decir "te amo", primero hay que saber decir "yo".
El egoísmo razonable. La necesidad de pensar de vez en cuando en uno mismo, para conseguir el equilibro personal. La necesidad de hacerte valer para que los demás te valoren. De tener la valentía de mostrar tus sentimientos sin juzgar, y sin temor a ser juzgado. De defender como de verdad es uno, por encima de lo que piensen los demás. La necesidad de ser simplemente feliz sin dar explicaciones a nadie... Sean cuales sean las consecuencias.
Fuente: FoQ, Antena 3.
jamás se puede ser "simplemente feliz" ¬¬
ResponderEliminarsomos demasiado tontos como para tener una vida feliz
:O tambien tengo esa entrada en mi blog
ResponderEliminarNo me extraña nada, es una frase con taaanta razón...
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